COTECAL cumple 56 años, el orgullo de pertenecer

Quizá el principal motivo de satisfacción de quienes sentaron las bases de nuestra Cooperativa constituía el hecho de pertenecer, de ser un socio más de esta entidad, en la que muchos dejaron marcada su impronta desde el lugar que les tocó ocupar.
Independientemente de la existencia de los Consejos de Administración para ejercer la conducción, una cooperativa crece, se desarrolla y se consolida con el aporte y la participación constante de sus asociados, y con la participación dinámica del Personal que ejecuta la visión y misión definida.
Así fue desde sus orígenes ¿Qué habría sido de El Calafate en materia de comunicaciones sin el trabajo de aquellos que sembraron la semilla de esta entidad?
Hoy todo resulta más sencillo de alcanzar, pero en esos años, demandó esfuerzo, dedicación y por qué no mencionarlo, riesgos patrimoniales para los promotores del proyecto.
Cuando todo comenzó éramos un pequeño pueblito de pocos habitantes, alejado de los grandes centros urbanos, un puñado de personas que ni llegaba a considerarse mercado para las empresas que podrían haberse instalado aquí, un lugar donde no había rentabilidad, donde no se podía hacer un negocio de las comunicaciones.
En ese marco solo el esfuerzo solidario y la búsqueda de un bien común eran motivo para lograr el objetivo.
Y así lo hicieron, ese fue su norte, contar con un servicio que quizá ni siquiera era requerido por aquella población, pero que nuestros Socios Fundadores, con una visión a mediano y largo plazo, consideraron fundamental.
Nuestra población creció a un ritmo vertiginoso, y los avances de la tecnología hicieron que en muy poco tiempo se registraran múltiples cambios y hubo que estar a la altura.
Se tomaron decisiones en función de objetivos propios pero sin perder de vista lo que sucedía en el mundo para estar a la vanguardia y tener la capacidad de dar respuestas antes que surgieran las demandas.
Cooperativismo es compromiso, y ese compromiso existió durante estos 56 años, con aciertos y errores, con sentido de pertenencia o meramente como usuarios de servicios.
¡Feliz cumpleaños COTECAL!
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