“¿Hay un médico a bordo?”
La doctora Verónica De Cristófaro auxilió en pleno vuelo a un pasajero. Fue este martes en el trayecto El Calafate-Buenos Aires.
El vuelo 1863 de Aerolíneas Argentinas que partió de la villa turística a las 8.55 se desarrollaba con absoluta normalidad, hasta que desde el fondo del avión comenzaron a pedir ayuda y hacer sonar los clásicos timbres de llamado a la tripulación.
Ante el imprevisto escenario, el personal de la compañía preguntó si había algún médico a bordo y la Doctora Verónica De Cristófaro, que regresaba a la Capital Federal en ese viaje, acudió de inmediato para asistir al viajero. Era un hombre oriundo de Córdoba, Arquitecto, que viajó a conocer el glaciar Moreno, y en el regreso se descompensó abruptamente por una baja considerable de presión.
Faltaba aún más de una hora de recorrido por lo que la intervención inmediata y las actuaciones pertinentes permitieron estabilizar al pasajero cuya tensión arterial había bajado a niveles extremadamente bajos que llegaron a 60/30.
El resto del traslado el turista lo hizo con auxilio de oxígeno, y una vez que se recuperara, De Cristófaro se mantuvo a su lado y lo acompañó en el descenso al llegar a Aeroparque.
La escena, digna de una película de suspenso fue en este caso absolutamente real, y el final feliz no atribuible a un guionista sino a la eficiente intervención de una profesional de la salud reconocida en su actividad por la comunidad de El Calafate.
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