Homenaje a los voluntarios del SAMIC en su día

Homenaje a los voluntarios del SAMIC en su día

Alejandro Cullen, uno de ellos, fue quien visiblemente emocionado compartió sus sentimientos en el acto desarrollado en el hospital al celebrarse el día del voluntariado en salud.

Dijo Rabindranath Tagore: "Dormía y soñé que la vida era alegría. Desperté y vi que la vida era servicio. Serví y supe que el servicio era alegría”

El día 4 de octubre se celebra en todo el mundo el Día del Voluntariado en Salud, en honor a San Francisco, el pobre de Asís, patrono del voluntario hospitalario, rindiendo homenaje de esa manera a quienes trabajan en forma gratuita y solidaria en tareas de apoyo a los enfermos, sus familias y a las instituciones de salud.

Los voluntarios merecen en su día el reconocimiento a su trabajo desinteresado, altruista y abnegado.  En nuestros días la solidaridad suele pasar desapercibida sin ocupar demasiado espacio en el estilo de vida impuesto. 

En este día tan especial, queremos honrar y agradecer especialmente a un grupo de voluntarios que, gracias a la iniciativa de la Dra. Virna Almeida y todo su equipo de Epidemiología e Información Estratégica en Salud, desde fines del año pasado ha colaborado activamente en el rastreo y seguimiento de contactos estrechos de casos confirmados de Covid-19.

Quiero remarcar a 8 personas que en estos meses de pandemia ofrecieron algo que cuesta poco y vale mucho: su tiempo.

Desde la creación del grupo “John Snow” se detectaron en El Calafate 2.790 casos confirmados de COVID-19. Y de ellos pudimos detectar 6.184 contactos estrechos

Ellos son:

En primer lugar, una mujer, que tuvo como función llamar a todos los casos detectados, para averiguar con quiénes habían estado, a fin de poder informarlo a los encuestadores. En lo que va del año hizo el rastreo de 1.934 personas (el 80% de los casos): mi mujer, Adriana González.

Su principal asistente, quien comenzó como encuestadora y posteriormente se dedicó al área de rastreos. Hoy podemos decir orgullosos que en breve formará parte del plantel estable del SAMIC: Gisella Andérica.

El único varón de los encuestadores: David García.

En este grupo, una de las encuestadoras se transformó en nuestra “Sherlock Holmes”. Todavía no sabemos cómo hace para encontrar a todos los contactos, aún de aquellos que estaban sin teléfono: Karina Gómez.

Una de esas personas a las que no hay que pedirles nada, ya que se anticipan a las necesidades, y se ofrecen antes que surja la demanda: Verónica Cabrera.

Una maestra jubilada que no sólo ofrece su tiempo, sino que se compromete con sus encuestados, llegando incluso a buscarlos y llevarlos al Hospital, o a gestionarles cualquier tipo de ayuda: Alejandra Carranza.

Alguien que no solamente es una encuestadora, sino que también se ofrecía permanentemente a colaborar en las capacitaciones que se brindaban a los alumnos de la UNPA: Alina Quiroga.

Una vecina, la última en sumarse al grupo, que en breve tiempo realizó tantas entrevistas como muchos que comenzaron en diciembre: Ada Estela Silva.

Todos ellos, junto a los alumnos de la UNPA, han construido un puente entre la comunidad y el SAMIC: un puente que sirvió para que esos vecinos recibieran ayuda, asesoramiento, apoyo, contención y el cariño necesario para sobrellevar estos difíciles momentos.

Nada habría funcionado si ese puente no estuviera construido sobre sólidos pilares y cimientos: el equipo de Epidemiología que recibía, cargaba, derivaba, y volvía a cargar toda la información recabada, transmitiéndola con profesionalismo y diligencia, aclarando cualquier duda o situación imprevista, trabajando en jornadas de 12 a 14 horas diarias, de lunes a lunes. Estos pilares tienen nombre y apellido: Natalia Flores, Claudia Cruz, Juan Thouvier, Mónica Cáceres, Maida Coria y Alejandra Molina.

Y finalmente, pero no menos importante, al arquitecto de ese puente: el alma máter del grupo, quien con su iniciativa, gestión y empuje hizo posible el éxito de esta misión: la Dra. Virna Almeida.

No quiero olvidarme de otros héroes anónimos: los familiares de estos voluntarios: quienes muchas veces cubrieron las ausencias de sus actividades hogareñas, brindándoles así la tranquilidad y el tiempo para cumplir su cometido.

Es mi deseo que este ejemplo de solidaridad, estoicismo, abnegación y altruismo sea el disparador de muchos otros dentro de la comunidad, de la provincia y de nuestro país.

Podremos ser optimistas si eso sucede.

Muchas gracias, y que Dios los bendiga

También pueden ver la videograbación del acto en:
https://www.youtube.com/watch?v=pmETOdsepY0&t=29s