¿Se avecina una temporada complicada en El Calafate?

¿Se avecina una temporada complicada en El Calafate?

 

 

 

 

Por Pablo Ferro

En los últimos meses, los indicadores turísticos de la localidad han mostrado fluctuaciones significativas que reflejan una tendencia preocupante para la temporada 2024-2025.

Los datos oficiales del Observatorio Económico de Turismo de Santa Cruz indican que el ingreso de visitantes a Parques Nacionales ha experimentado una disminución constante desde marzo de este año.

El Parque Nacional Los Glaciares, un ícono turístico, registró una merma del 19,8% en julio de 2024 en comparación con el mismo mes del año anterior. Esta tendencia se refleja también en la cantidad de pasajeros transportados por avión, que, si bien ha aumentado en un 6,45% en lo que va del año, ha mostrado caídas mensuales en comparación con 2023.

A nivel nacional, la demanda turística ha mostrado claras señales de estancamiento. Según el INDEC, la afluencia de turistas extranjeros disminuyó ligeramente, afectada por factores como la inflación y la inestabilidad económica global.

Se espera que esta tendencia se mantenga durante la próxima temporada alta, que va de octubre de 2024 a febrero de 2025, lo que podría impactar negativamente en la economía local de El Calafate.

La crisis habitacional de la región, sumada a los bajos salarios en el rubro turístico y la caída en los ingresos en la Patagonia, configura un escenario complicado para los trabajadores.

Los alquileres elevados y la escasez de viviendas exacerban el problema, algo que obliga a muchos empleados del sector a buscar alternativas fuera de la ciudad.

En el panorama internacional, la situación geopolítica y las restricciones de viaje en algunos países claves han limitado el flujo de turistas extranjeros. Organismos como la OMT alertaron sobre la posible desaceleración del turismo global, lo que podría influir aún más negativamente en la situación de destinos como nuestra localidad, que dependen en gran medida de la llegada de visitantes del ámbito internacional.

La combinación de estos factores sugiere una temporada desafiante para el turismo en la región, con pronóstico reservado.